Mis amigos de Guat2do Travel Experiences me invitaron a una de las experiencias más desafiantes de mi vida: escalar el volcán Acatenango y el volcán Yepocapa.
Empezamos la aventura en la noche, saliendo de Antigua Guatemala alrededor de las 11:30 pm. Nos recogieron en el parque central y el trayecto duró aproximadamente media hora hasta una parada donde nos equiparon con chaquetas para el frío, bastones de senderismo y otros implementos. Luego, subimos nuevamente al pickup 4×4 para comenzar el ascenso al volcán Acatenango. Esta parte fue una de mis favoritas, ya que ascendimos durante aproximadamente una hora por empinadas colinas llenas de tierra, piedras y ramas.
Llegamos a un punto donde ya no era posible continuar en el vehículo; el resto del camino debía hacerse a pie debido a la dificultad del terreno. La caminata fue llevadera hasta llegar a los campamentos en el volcán Acatenango. Desde allí, se pueden apreciar las erupciones del volcán de Fuego; de noche, es una experiencia única. El estruendo y el rojo vivo de las erupciones son fascinantes.
Al llegar a los campamentos, descansamos alrededor de media hora antes de continuar. Lo siguiente en la excursión fue el descenso del volcán Acatenango. Esta parte fue complicada debido a los estrechos caminos y partes al borde de barrancos.
Completamos el descenso de Acatenango, y a lo lejos, en el volcán Yepocapa, vimos luces de otros viajeros que estaban escalando. Me sorprendió, ya que nos tocaba escalar ese volcán a continuación. Pensé que sería un reto desafiante, y eso me entusiasmó.
Después de un descanso de 30 minutos, comenzamos la escalada a Yepocapa. Esta parte fue difícil, con secciones empinadas que requerían buen calzado para evitar resbalones. La escalada se sintió eterna, y tomamos breves descansos de 3 minutos para recuperar el aliento. Tras más de una hora, alcanzamos la cima del volcán Yepocapa.
Llegar a este punto fue impresionante; el silencio y la tranquilidad solo eran interrumpidos por el viento. La razón principal para esta escalada era apreciar el amanecer desde la cima, y llegamos justo antes de las 5 am. Ver el amanecer sobre las nubes fue una de las experiencias más impactantes de mi vida. La sensación de ver el sol salir en el horizonte es indescriptible y algo que todos deberían vivir al menos una vez.
Junto a la cima se encuentra el volcán de Fuego. Aquí, ya de día, escuchamos más claramente los estruendos y presenciamos varias erupciones, lo cual fue fascinante. Después de más de una hora en la cima, disfrutando del amanecer y las erupciones, nos esperaba un reto más: el descenso de Yepocapa y el ascenso de nuevo al volcán Acatenango.
El descenso fue más rápido de lo que esperaba, aunque me caí tres veces debido al calzado inadecuado. Una vez abajo, tomamos otro descanso. Ya sentía el cansancio, y las horas sin dormir empezaban a notarse, pero la experiencia en la cima compensaba todo.
Comenzamos el ascenso de nuevo, y esta parte fue aún más retadora debido al agotamiento. Pero mi determinación me llevó a continuar. Nos tomó más de una hora alcanzar los campamentos, enfrentando caminos desafiantes y barrancos. Finalmente, llegamos a los campamentos, agotados pero satisfechos.
Ya era de mañana, alrededor de las 10 am, y nos recibieron con pancakes y café. Fue la mejor recompensa después de escalar y descender dos volcanes en menos de 12 horas. Disfrutar del café mientras veía las erupciones del volcán de Fuego fue una de las mejores experiencias de mi vida. Sin duda, repetiría esta aventura al menos una vez al año para apreciar mejor mi mundo y cuidarlo.
Gracias a Guat2do Travel Experiences por esta experiencia inolvidable. Los recomiendo totalmente, ya que hacen que cada viaje sea único y especial.
Escrito por Gerson Schwank.
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